La rebelion de Orwell .

Articulo de Ivan Lestzno . Estudiante.

Pinchad AQUÍ

Ivan Lestzno

¿Hay alguien me recomiende Rebelión en la granja?

Me sé de corrillo la intención influenciada por las ideas de cada cual que muestra su amabilidad de darme su opinión, así que las concepciones sobre su falsa traición, su falsa ambigüedad, su falsa falta de compromiso están de más dentro de la opinión que me podáis conceder, aunque sois completamente libres de hacerlo sí así lo queréis.

Mi opinión sobre el argumento general del libro es que su experiencia en la guerra civil fue determinante en el objetivo de su crítica hacia la decadencia del socialismo en la U.R.S.S., presente antes de fallecer y como creía que seguiría decayendo en el futuro, sin olvidar que ante todo y en primera instancia que su animadversión siempre la dirigio hacia el imperialismo y el capitalismo.



Cierto que George Orwell pecó de abstenerse de contraatacar a sus odiadores con la misma dialéctica con la que le fustigaban, pero el simple hecho de no soportar la pedantería podía con él , de que sea como sean tus intenciones has de tener cuidado a la hora de llevarlas a cabo, ya que sin quererlo puedes acabar beneficiando a quien no debes y perjudicando a quien no debes. También es verdad que parecía ser un tipo ambiguo con demasiado que ocultar y callar por su crítica hacia casi toda forma de gobierno, pero esta actitud viene de  poseer criterio , de lo que tiene ser alguien que no se casa con nadie. Me identifico bastante con él por ello. Además, antes de hablar sobre este autor es obligatorio hacer un pequeño repaso sobre su vida para así entender una parte de su postura política a lo largo de ella.

Anticomunista, trotskista, anarkoide (este término me fascina, alarde de pedantería ratera bibliotecaria acojonante), oportunista, idiota. La lista entregada a una compañera escritora que trabajaba en una revista controlada por los servicios secretos británicos le afeó para siempre. Su enfermedad, su ida de mal en peor por ello, su desilusión libertaria, antiestatal y el hecho de presenciar la traición por parte de aquellos comunistas que comenzaron a perseguir a otros comunistas militantes de partidos como el POUM y a anarquistas que no se mostraran acorde con los objetivos del resto de comunistas, (echando por tierra la escandalosa calumnia que demasiados convenidos declaran como oficial de que fueron anarquistas los que comenzaron a crear una guerra particular por su cuenta empezando por comunistas), hicieron mella en él tras su experiencia en la guerra. Mi opinión personal es que, encontrándote en el estado en el que puedas encontrarte, un acto como el que perpetró al final de su vida no le justifica ni le exime política e idealísticamente para nada, si bien personalmente,   se le veía una persona tan ingenua que incluso hasta podía rozar la imbecilidad, cariñosamente hablando.



Creo que únicamente se trató de un hombre con criterio, con espíritu crítico, idealista, traumatizado por las numerosas calamidades a las que tuvo que hacer frente desde pequeño, pasando por la explotación de la que fue testigo en Birmania siendo policía, sin olvidar nunca su combate en la guerra civil, ingenuo y rompedor por la época que le tocó vivir. No en vano, los sectarios izquierdistas lo toman por pequeño burgués y jugador del imperialismo mientras que los derechistas de todas clases, sectarios o no, la derecha es la misma sea cual sea la posición, un rojo peligroso al que había que vigilar.

Lo último es una realidad objetiva, se mire por donde se mire, no le guste a quien no le guste.
Es necesario poseer grandes agallas, tenerlas bien colocadas, grandes ideales, tenerlos bien claros, gran humanidad y tenerla bien natural y preparada para marchar a una guerra en la que combatir en un frente y en primera línea de fuego, dispuesto a sacrificar y dar tu vida por cualquier compañero y ser humano de a pie, de la que probablemente no sobrevivas.
Únicamente ya por esto, merece todo el respeto del mundo.