Los cojones de Don Alejo:El corrido mas merecido....

              “Pensaban que había un comando allá dentro y sólo era mi señor padre”
               Sandra Garza, hija de Don Alejo.


La noticia ha estado en todos los sitios ;A continuacion tal y como ha sido publicada en diferentes medios:
El estado mexicano de Tamaulipas, fronterizo con EE.UU., es uno de los más  duramente castigados por la violencia ligada al narcotráfico. Es territorio del cártel de ‘Los Zetas’, los sanguinarios autores de la matanza de 72 inmigrantes el pasado agosto a los que previamente habían robado todo lo que tenían.

Tamaulipas es el reflejo de una guerra que el gobierno Mexicano parece incapaz de ganar, pese a los reiterados mensajes de firmeza del presidente Calderón y un potente despliegue policial y militar que no logra dar seguridad a los habitantes. Más de 500 rancheros han abandonado este año la región al no poder pagar las millonarias “cuotas de protección” que exigen los narcos.

Pero la historia del hombre que dijo “basta”, Alejo Garza Tamez, ha conmovido a la opinión pública mexicana que lo ha encumbrado como héroe popular.

Garza era un próspero empresario y propietario del rancho San José, a las afueras de Ciudad Victoria. Un objetivo jugoso para los narcos, que le visitaron el pasado sábado 13 de noviembre con una petición directa: la entrega del rancho a cambio de conservar la vida. Don Alejo se negó, y los matones – presuntamente Zetas -  le concedieron 24 horas para recapacitar, tras lo cual volverían armados.

Aquí comienza la leyenda de Don Alejo. Lo primero que hizo fue reunir a todos sus trabajadores y ordenarles que se fueran a sus casas, tenían el día libre. A continuación reunió todas sus armas y pertrechos de caza. Dedicó las siguientes horas a escoger las mejores posiciones de tiro y a fortificar los puntos débiles del edificio. 

Cuando una treintena de sicarios armados apareció de madrugada para tomar posesión del rancho, Don Alejo abrió fuego. Lo que encontraron los militares mexicanos tras el tiroteo lo describe la excelente crónica deMilenio.com.






Don Alejo mató a cuatro sicarios e hirió a otros dos antes de morir. Según algunas versiones, tuvieron que usar granadas para abatirlo. “Pensaban que había un comando allá dentro y sólo era mi señor padre”, contaba su hija,Sandra Garza, a la televisión. Para entonces era demasiado tarde para los agresores, la cercanía de los militares les puso en fuga. El rancho San José no cayó.

La figura de Don Alejo ha sacudido las conciencias mexicanas. Algunos temen que siente un mal precedente. Por heroico que fuera su sacrificio, no todos creen que suponga una diferencia en el desolador panorama de la violencia ligada al narcotráfico, y temen que induzca a más personas a tomarse la ley por su mano.

Pero para muchos, Don Alejo es un verdadero mito, una inspiración y un ejemplo de dignidad. Lo atestiguan  las webs dedicadas a él y las menciones que le hacen en Facebook y Twitter. Don Alejo ya tiene incluso sus corridos, la fibra con la que se tejen las leyendas.  





fuente yahoo noticias


Cualquiera en su sano juicio hubiera puesto tierra de por medio .Don Alejo no.
Que vengan 30 o 40 sicarios a por ti no es algo que invite a la duda ,asi que ole tus huevos ,Don Alejo.


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